GUYBRUSH DA INUSUALMENTE UN CABEZAZO.


CUMPLIENDO LA PROFECÍA.

       En una nueva animación aparecemos en un islote, dentro del robot, y hablamos con Horacio sobre lo que vemos, una gran torre amplificadora del Insulto Definitivo. A partir de ahora pasamos a ser el propio robot mono gigante.

       Vamos todo a la derecha y cogemos una plancha muy grande del suelo para usarla en la torre central más baja. Nos subimos (saltamos) sobre la torre baja y saltamos sobre la plancha muy grande que usamos como si fuera un trampolín y vamos rebotando hasta llegar a la cima de la torre más alta. Aquí solo tenemos que mover el interruptor excesivamente grande.

       Volvemos a pasar a otra animación bastante larga. LeChuck y Mandril están muy enfadados por que su cetro del Insulto Definitivo no funciona. Tienen a Elaine retenida y en un despiste se le escapa su símbolo gubernativo. Mandril lo coge, lo coloca en el cetro y lo prueba en el Napias para comprobar que su invento ya funciona. ¡Tienen el Insulto Definitivo!. Mandril da rienda suelta a sus locuras de grandeza y envía sus insultos al amplificador de la isla pero no pasa nada porque hemos apagado el interruptor. LeChuck se enfada y se va. Pasamos a nosotros que llegamos a la isla, aparcamos el robot, bajamos de él y ayudamos a Elaine para que escape de Mandril. Mientras, LeChuck ha entrado dentro de su estatua, la que le construían en la ciudad, y que también se convierte en un robot enorme de su figura. Atrapa a Elaine con una mano y a Mandril con la otra pero nosotros logramos escapar. Mandril usa su cetro en la estatua y así logra que obedezca sus órdenes que no son otras que mate a Guybrush. Regresamos al robot mono y empezamos el definitivo Monkey Kombat.

       Ahora deberemos luchar con nuestro robot y vencer al contrario de la misma forma que antes vencimos a los pobres monos en el Monkey Kombat. Así se cumplirá la profecía de los monos. Los movimientos y los insultos son los mismos o sea que se supone que ya los tenemos bien aprendidos. Ésta vez no hay victoria posible. No puede ganar ninguno de los dos ya que aunque recibamos impactos del contrario las barras de energía se irán recargando solas y nunca se van a gastar. Solo tenemos una manera de vencerlo y es adjudicándonos tres empates cosa mucho más fácil que nuestras anteriores peleas.

       La cuestión es empatar como sea y para eso solo debemos ponernos en la misma posición que nuestro contrario. Primero es mejor luchar un poco y luego pasamos directamente a copiarle su posición con lo que conseguiremos un empate. Luego conseguimos dos empates más y se acaba la pelea venciendo nosotros. Y ya solo nos falta ver las animaciones finales y reír un poco.

UN FINAL FELIZ.

       Después del tercer empate Elaine escapa del robot de LeChuck y éste, preso de la rabia, coge a Mandril y lo destroza con las manos del robot. Al hacer esto el cetro del Insulto Definitivo explota y el robot estalla en mil pedazos. Bajamos de nuestro robot mono y se produce nuestro encuentro con Elaine y la de ésta con su abuelo Horacio que creía muerto. Le presentamos a Jojo Jr. y éste se va con sus hermanos llevándose le robot, pero en su lugar se queda Timmy. Todo ha acabado bien.

       El abuelo Horacio vuelve a ser el Gobernador y nosotros así somos libres para hacer lo que queramos, o al menos eso es lo que dice Elaine. El problema es que contestemos lo que le contestemos, de las frases que salen, Elaine acaba enfadada porque ninguna la convence. ¡Como son las mujeres!...


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