Nos despedimos de nuestros padres en la estación de trenes de Melk y vamos camino de Viena. Una vez llegamos aparecemos en el Conservatorio y miramos el pupitre, la ventana y el pasillo. Pulsamos en nosotros, Wilma, y aparece el profesor Arthur al que hablamos: “¿Dónde ha estado?”, “Me alegro”, “Voy avanzando”, “Viena es una ciudad…” y “¡No puedo aceptarlo!”.
Aparecemos frente a un bosque, en algún lugar de los Alpes y miramos las nubes, las montañas, los postes del teléfono, el bosque y la cabaña. Pulsamos varias veces en ella para dirigirnos hacia allí.
Una vez dentro de la cabaña miramos la ventana, el violín y los dos cajones de debajo. Al otro lado, a la derecha, miramos, de arriba abajo, el armario, las cartas (leerlas todas enteras), la composición incompleta, la “variedad tonal”, el libro de poemas y el de “Todo cambia”. Seguimos mirando más abajo el teléfono y el bolso, del que sacamos un bocadillo y una carta que leemos entera.
Suena el teléfono, lo cogemos y hablamos con Leos: “¿Quién es?”, “Prefiero no decírselo”, “Estoy muy lejos”, “Nada”, “Que vergüenza…”, “Se diría…”, “Me llamo Wilma” y “Adiós, Leos”. Pulsamos en el bocadillo, nos lo comemos y nos dormimos. Entramos en un sueño en el que estamos en la cama con Arthur, pulsamos en él y decimos: “Ahora sí”, “Quédate un poco más”, “Tengo sueño”, “¿Amantes secretos?” y “¿Porque tanta urgencia?”.
Despertamos y vemos que todo ha sido un sueño al pulsar en nosotros. Miramos el violín y decimos: “Examinar de carca”, “Tocar una melodía” y “Seguir tocando”. Oímos unos ruidos y miramos la parte derecha y negra de la pantalla y después la lámpara. Miramos por la ventana y automáticamente salimos al porche. Miramos el cielo, las montañas, el bosque, el paso, las flores y la lluvia.
Volvemos a entrar en la cabaña, suena el teléfono y entramos en otro sueño en el que estamos en el fondo de un pozo y no nos podemos mover. Miramos arriba y decimos “¡Gaah!”. Volvemos a mirar arriba y pulsamos en la sombra que aparece diciendo “¡Socorro!”, “¡Sí!, ¡aquí abajo!” y “No puedo moverme”.
Despertamos otra vez del sueño y pulsamos en la ventana hasta oír otro ruido. Miramos el armario y vemos que el sonido viene de dentro. Salimos al porche.
Miramos las flores y conseguimos una llave. Entramos y pulsamos en el armario para abrirlo. Miramos los bocetos y el reloj. Volvemos a mirar los bocetos y luego la carta, que leemos entera. Miramos nuestra composición y la “variedad tonal” y decimos “La placentera sorpresa…”. Volvemos a mirar nuestra composición y el libro de poemas y después elegimos “Dormir”. Despertamos cuando suena el teléfono, lo cogemos y decimos: “Buenas tardes…”, “¿Qué quiere?”, “Que raro…”, “¿A qué te refieres?”, “Piensas algún a vez…”, “Quiero estar con Arthur” y “¡Mi obra lo convencerá!”.
Miramos la ventana y a nosotros y decimos “Intentar silenciar…”. Miramos la composición, el libro “Todo cambia”, las cartas y la “composición incompleta”. En la dedicatoria decimos “A mi mentor…” y “Con todo mi amor”. Y ya directamente pasamos a la Gran Sala del Musikverein de Viena donde damos el concierto que hemos compuesto, “La Canción del León”.
Vemos las animaciones y acaba esta primera parte de cuatro de la aventura. Y al final de todo podemos ver ya un adelanto de lo que será la segunda parte.
Estamos en la estación de trenes “Emperadora Elisabeth” y vemos la charla entre Paul y Frieda hasta que él se va. Aparecemos después en una calle de Viena donde el joven pintor Franz Markert habla con su abuelo, Joseph. Decimos “Have you changed...?” y entramos en un salón donde hay una especie de recepción. Nos presentan y decimos “Each of us…” y “One of the ladies maybe?”. Vamos a la derecha y hablamos con Klimt sobre “Did I make…?” y “How do you…?”.
Hablamos con el señor Moritz, el de al lado, de las primeras frases. Miramos el cuadro, el señor del balcón y hablamos con el grupo. Volvemos a la derecha y hablamos con la señorita Grete sobre “I apologize…”. Izquierda y hablamos con el abuelo de todo. Volvemos a hablar con Klimt y con Moritz, con éste último de todo y varias veces. Volvemos a hablar con Grete de todo, usando siempre la primera frase, y se va.
Salimos por la izquierda y aparecemos en un mapa con solo dos localizaciones. Vamos al estudio. Llaman a la puerta, abrimos y aparece el señor Moritz que nos va a servir de modelo. Le decimos “You look…”, “Are you confortable?”, “If you must”, “Why did you decide…?”. “400…”, “Again…”, “Will you...?” y “I know something…” y se va.
Después de unos momentos de reflexión miramos todos los cuadros y al llegar al del caballete decimos “Maybe Fraulein…”. Miramos por la ventana, las herramientas, el diván y el portafolios de la izquierda. En él miramos los dibujos y decimos “Inspect”, “Next drawing” e “Inspect” hasta verlos todos. Cuando estamos en el boceto del hombre con la mano en la cabeza decimos “Sell”. Salimos del estudio.
En el mapa vamos al salón, el lugar donde el día anterior fuimos de recepción. Hablamos con Grete de “Would you take…” y “I´m not sure”. Siguen las charlas, pero ahora en medio de sus amigos, y decimos “He was a …”, “I realize…” y “Ang go…?”. Salimos y en el mapa vamos al mercado. Decimos al abuelo “Fraulein Lawwiczak…”, “Apparently…”, “Fraulein Lawwiczak…”, “A woman who…”, “She has an…” y “Then I will…”.
Lo miramos todo y hablamos con Madame Thernhardt sobre “No…”, “My name…”, “You´re thinking…” y “Every…”. La seguimos a la derecha y volvemos a hablarle: “What are you…?”, “The Green…”, “The red…”, “The blue…” y “Because…”. Volvemos junto al abuelo y decimos “She wants…”. Salimos del mercado por la izquierda y en el mapa vamos al café.
Hablamos con los matemáticos sobre “They seem…”. Volvemos a hablar, ahora con el de la derecha, Emil Schell, sobre “What a subject…”, “Your face…” y “I must…!”. Salimos por la derecha y volvemos al mercado. Derecha y hablamos con Madame Thernhardt de “I want…”. Salimos, regresamos a nuestro estudio y esperamos un momento.
Llaman a la puerta y abrimos a Madame Thernhardt. Decimos “I am at peace…”, “Perfect”, “This is a woman…”, “Someone…”, “Your voice…”, “Why did you…”, “Is it sex?”, “Is it alcohol?”, “Is it gambling?”, “What is…?”, “You said…”, “Your beauty…” y “I´m missing…”. Una vez solos miramos el cuadro que acabamos de pintar y salimos del estudio.
Vamos al salón y hablamos con Klimt: “Herr Klimt…” y “Have you seen…”. Se va y aparece Grete a la que hablamos de “My painting…” y “It happens”. Aparecemos en la consulta del doctor Freud y le hablamos sobre “I see…”, “Aspects…”, “ I´ve never…” y “My model leaves”.
Volvemos a estar en la consulta del doctor Freud y decimos: “There´s…”, “She told…”, “No, not at all” y “There´s…”. Acabamos en el mapa y regresamos a nuestro taller. Miramos el cuadro nuevo y quedamos frente a él. Pulsamos en la parte blanca de la derecha (“Torn figure”) y decimos “…rough” y “Grete…”.
Después pulsamos en la parte central (“Cowering figure”) y decimos “He mentioned…”. Pulsamos en “Deformed figure” y decimos “Experience?”. Pulsamos en la figura de la izquierda (“Pleading figure”) y decimos “…he tolked to others…”. Y así tenemos un momento de inspiración y acabamos nuestro autorretrato.
Vamos al salón y hablamos con Gustav Klimt sobre “…Grete”, “Do you know…?” y “I could try to bring…”. Salimos al mapa y vamos al apartamento de Grete. Después de llamar a la puerta decimos “It´s me”, “Would you let…?”, “As ready…”, “I´ve pacient…”, “It´s wanted…”, “Rescuing me” y “As long…”.
Aparecemos en el Mercado con nuestro abuelo Joseph y decimos “I did”, “I´d paint…” y el abuelo se va. De nuevo aparecemos en nuestro estudio y decimos “Grete…”, con lo que nos ponemos a pintar y con esto llegamos al final de la segunda entrega de ésta aventura.
Theodor se despide de sus amigos en la Estación Central de Viena y coge el tren para la zona de Wiener Neustadt. Cambiamos de personaje y ahora somos la señorita Emma Recniczek que entra en el Café y pregunta al maître por un grupo de matemáticos que se hacen llamar “El Radio”. Decimos “…mensaje…” y “…necesidades femeninas”. Vamos a la izquierda, miramos las tres puertas y entramos por la del círculo.
Hablamos con el camarero sobre “…invitación…” y vamos a la derecha, donde hablamos con el Profesor Zahler. Izquierda y salimos del Café. Aparecemos en un edificio de apartamentos, en el segundo piso, y hablamos con la niña, Nikol sobre “Seguro…”. Entramos en nuestro apartamento, izquierda y vamos pulsando en la pizarra varias veces hasta que llaman a la puerta. Vamos a abrir y nos entregan un paquete. Lo abrimos y leemos la carta en la que se nos informa de la muerte de Jan, nuestro padre.
Miramos la pizarra, el armario, el espejo y salimos por la derecha. Aparecemos en un mapa y vamos a la Biblioteca de la Universidad de Viena, que es donde trabajamos. Decimos “…invertir…” y “Una hoja…”. Miramos al lector, los libros devueltos y salimos. En el mapa vamos al Mercado, pero parece que nos hemos equivocado y acabamos en una calle.
Miramos varias veces el maniquí de la izquierda y regresamos al mapa por la derecha para volver a nuestro apartamento. Abrimos el armario y cogemos las gafas, la chistera, la camisa, la chaqueta, la corbata y el pantalón. Pulsamos en la ropa, que hemos dejado sobre la mesa, y nos cambiamos a Emil.
Vamos al Café y hablamos con Maurice, el maître sobre “…cuarto de atrás…”. Salimos porque no están los matemáticos y en el mapa vamos al Mercado. Hablamos con todo el mundo pero sin comprar nada. Mapa y a la Biblioteca. Hablamos con Hugo, el bibliotecario, de “¿Cómo está hoy?”, “Quizás pueda ayudarle” y “¡No es aleatorio!”. Mapa y al Café. Hablamos con el maître sobre “…Radio”. Izquierda, entramos por la puerta central, derecha y miramos la pizarra. Aparece un gráfico y debemos poner la muesca después del 3.
Aparecen los matemáticos y ahora sí que nos dan la bienvenida. Miramos la pizarra, hablamos con el de la izquierda, Nenner, miramos el sillón vacío y pulsamos en Zahler para hablarle de todo. Ahora hablamos con todos, en especial otra vez con Nenner de todo y con Rauch. Salimos por la izquierda y derecha a la puerta. Sujetamos la puerta para que salgan las señoras y salimos para regresar al apartamento. Pulsamos en la pizarra y alargamos la flecha hasta que sale una “X” debajo. Llaman a la puerta, nos cambiamos a Emma, abrimos y hablamos con Nikol.
Aparecemos en el mapa, cambiamos a Emil, vamos al Café y entramos en “El Radio”. Miramos la pizarra y alargamos la flecha hasta que el rombo de la pizarra queda con un “?” debajo. Después alargamos un poco más la flecha hasta que el “?” queda en la parte inferior derecha y resolvemos el problema. Zahler se va y Nenner nos cita. Vamos a la entrada del Café y nos sentamos en su mesa.
Hablamos, aparece el pintor Franz Markert y siguen las charlas. Decimos: “¡Sería un honor!”. Aparece otro gráfico, pulsamos en él y salimos del Café. Vamos a nuestro apartamento y aún en la calle el tío de Nikol nos para y hablamos: “Sí…”, “…amiga”, “…no” y “Su niñera le grita…”. De nuevo en nuestro apartamento nos cambiamos a Emma pulsando en la ropa y miramos la pizarra. Alargamos la flecha hasta dejar el gráfico como se indica en la captura.
Salimos y vamos a la Biblioteca. Elegimos “¿…porque ocurre?”. Viene un lector y decimos “…lista de espera”. Volvemos a pensar diciendo “¿…cómo cambia?”. Viene otro lector y respondemos “¿…Manchester?” y “…como contarlo”. De nuevo solos decimos “…canal”. Pulsamos en los libros devueltos y regresamos al apartamento. Miramos la pizarra y dejamos el gráfico tal como se muestra en la captura.
Salimos para visitar al pintor y al cabo de un tiempo regresamos al apartamento.
Vamos al Mercado, derecha y hablamos con el pintor, dos veces y de todo. Mapa y a la Biblioteca, donde aparece Eilrich que nos habla. Cuando se va hablamos con Hugo de “Solo estoy mirando” y salimos para el Café. Entramos en “El Radio” y automáticamente hablamos con Nenner de “Sí…”. Volvemos con los demás y hablamos hasta que regresamos a casa. Miramos la pizarra, los tres axiomas, la pizarra otra vez y aparece un gráfico que debemos dejar como en la captura.
El gráfico no es correcto del todo así que corremos la línea vertical de la derecha un poco a la izquierda, en el centro de la línea que desciende, y así acertamos. Aparece Nikol y salimos a la escalera para hablar con ella diciendo “…Emma”. De nuevo en nuestro apartamento miramos la pizarra y estiramos el grafico hasta que salen tres símbolos a la derecha. Cambiamos de escena y aparecemos en el hospital en el papel del doctor Zahler, que habla con su hermana moribunda sobre el temor que tiene a Emil.
Estamos en el Mercado hablando con el verdulero y volvemos al apartamento. Decimos “…boniatos” y “…mantener un estado”. Llama Nikol que dice nuestro nombre y el doctor Zahler, que nos está siguiendo, se entera de que somos una mujer. Por la noche vamos al “Radio” y cuando llega Zahler decimos “Esperaba…”. Cambiamos a Nenner, vamos al apartamento de Emil y decimos “A veces…”.
Universidad de Viena, 7:02 PM. Nos presentamos frente a la audiencia como mujer y decimos: “Me llamo Em”, “He venido a debatir…”, “…incompleto”, “El cambio ocurre con respecto…”, “Necesita un marco…”, “La hoja…”, “Está recitando…”, “Cambie su perspectiva”, “…más de un estado de destino” y “…edam”. Cuando entramos en la pantalla de las hojas que caen dejamos la hoja grande central justo sobre el camino, con lo que se ilumina y así vencemos el debate.
Seguimos hablando y decimos “¡Respeto…!” para hacer las paces con Zahler. Y ya en la calle tenemos las charlas finales con él.
Estamos en la estación de trenes de Wiener Neustadt y tomamos el papel de Albert, un periodista. Miramos al revisor y por la izquierda entramos en el tren. Vamos a la derecha, entramos en el compartimiento número 6, donde ya hay otras tres personas, y nos sentamos.
Miramos al estudiante y le recogemos los tres libros del suelo y la foto. Él es Theodor, un alumno de la matemática Emma Recniczek. Le hablamos de todo y recuerda a Emma cuando daba clases en la Universidad. Aparecemos frente a una página y leemos los tres párrafos de la izquierda. En la página de la derecha pulsamos en la flecha, vemos unos dibujos y nos dan unas explicaciones.
Al acabar decimos “Supongo…”. Volvemos a cambiar de escenario y ahora recordamos como entra por primera vez en “El Radio”. En el Café el maître le hace unas preguntas y respondemos los cuatro nombres (de arriba abajo). Fallamos pero seguimos a Thomas, el camarero, que nos lleva hasta una mesa.
Pedimos al camarero un pastel y cuando se despista entramos por la puerta central de la izquierda a “El Radio”. Hablamos con Emma de todo. Hablamos con todos los demás y miramos la foto. Salimos por la izquierda y volvemos a aparecer en el tren. Theodor sigue recordando y ahora aparecemos en el Mercado de Viena.
Está Emma y sus alumnos a los que dice que se va a Manchester. Como Theodor miramos al fotógrafo y hablamos con el niño de todo. Hablamos con Lukas, que nos da unos petardos, y volvemos a hablar con el niño para dárselos. El fotógrafo se queda solo y le hablamos para que nos haga una foto.
De nuevo en el compartimiento del tren hablamos con el Caballero de todo. Él es Paul, pintor pero que al final se ha dedicado a la falsificación. Cuando quedamos frente al periódico leemos todas las noticias. Volvemos a hablarle sobre el pintor Franz Markert y aparecemos en el Mercado, donde Paul tiene su primer recuerdo.
Decimos: “Escóndete…”, aparecemos en el mapa y al final el guardia nos atrapa. De nuevo en el tren siguen las charlas y Paul vuelve a tener otro recuerdo, apareciendo en una recepción de la alta sociedad. Decimos todas las frases y pulsamos en el perchero para cambiarnos.
Cogemos las servilletas para completar nuestro traje. Hablamos con el camarero para pedirle una copa. Derecha y hablamos con Gustav Klimt de todo. Hablamos con la chica del centro diciendo “¡…Lawncizak!”. Volvemos a hablar con el camarero, primero diciendo “No” y luego sobre todo lo demás. Otra vez hablamos con la chica del centro sobre todo.
Más a la derecha pulsamos en “Ver presentación”, viene Klimt y decimos “No…”. Volvemos a estar en el tren y decimos “…propia inspiración”. De nuevo aparecemos en la recepción y vemos la última obra de Franz.
Estamos de nuevo en el compartimiento del tren y hablamos con el granjero de todo. Se llama Otto y es el hermano de la famosa compositora y violinista Wilma. Volvemos a hablarle para que toque otra melodía con su armónica y la escuchamos. De nuevo le hablamos para que nos cuente algo sobre su hermana y entramos en un recuerdo de su infancia. Hablamos con el anciano, que nos da unas monedas.
Hablamos con el “hombre rudo” de “Wilma…”, “¡Armario!” y “Sí…”. Vamos a la derecha y hablamos con el desconocido, que resulta ser el músico y profesor Arthur Caban. De nuevo en el tren decimos “Ayudaba a la familia…”. Volvemos a recordar y ahora aparecemos en el campo frente a la granja.
Vamos a la izquierda hasta llegar a Wilma y su violín. Debemos acercarnos muy sigilosamente y solo movernos cuando ella cierre los ojos y conseguir cogerle el violín. Derecha y volvemos al tren. Decimos “…armónica…” y entramos en otro recuerdo. Estamos los dos niños cantando con nuestro padre y decimos “¡Otra vez, otra vez!” y “¡Tócala, papá!”. Wilma se pone a tocar y vamos pulsando en todos lados (el banco, las flores, la ventana…) hasta que volvemos a aparecer en el tren.
Los cuatro personajes siguen hablando y decimos “Seis meses…”, “Theodor…”, “¿…ambiciones políticas…?”, “…mi padre” y “Está arriesgando la vida…”. Ahora pasamos a “Paul…”, pero no quiere hablar, así que seguimos con “Otto…”, “Para eso no…”, “…alterando”, “Su familia…” y “La adrenalina…”. Al final llegamos a la estación, hablamos con los soldados, vamos a la izquierda y hablamos con el otro soldado.
Entramos en el vagón 5 y hablamos con Paul sobre “No ha llegado a contarnos…” y “Todos…”. Aparecen los demás y les damos la mano. Y con esto ya entramos en las animaciones y explicaciones finales de la aventura donde se nos explica como a seguido la vida y trabajo de todos los personajes después de verse interrumpida por la Primera Guerra Mundial.